Sa Galera fue uno de los siete feudos en los que se repartió Mallorca durante la Reconquista del Rey Jaime I; regentada por el caballero D. Nuño Sans, sus muros albergaron la más importante “caballería” de la isla.
Sus fértiles campos estuvieron cultivados, en su mayoría, por grandes plantaciones de viñedos, almendros y algarrobos. Hoy en día, la finca cuenta con más de 5000 almendros y con una de las más importantes yeguadas de cría de caballo de Pura Raza Mallorquina, de característica capa negra, cuyo porte y nobleza lo convierten en un magnífico animal. La familia Bonet-Company son los propietarios de la finca desde 1850, y se ha ocupado personalmente de la restauración de la casa, conservando la estructura original, resultando un acogedor y confortable hotel de dieciséis habitaciones con carácter propio.